Promoviendo un sentido de pertenencia

Por Kristin Jones

En una serie de conferencias que se transmitieron en reuniones comunitarias a lo largo del estado, The Colorado Trust invitó a expertos para que destacaran las estructuras, políticas y sistemas que marginan a las comunidades vulnerables, y a describir las estrategias que permiten a los residentes mejorar la salud de sus vecindarios y poblados.

Uno de los ponentes de la Serie de aprendizaje sobre la equidad en salud (HELS, por sus siglas en inglés, el profesor de Berkeley john a. powell, redujo los determinantes sociales de la salud a una causa: el sentido de pertenencia. Si un niño tiene acceso a una educación de alta calidad; qué distancia debe viajar un empleado para ir al trabajo; si alguien gana suficiente dinero para sobrevivir y si una cultura e idioma son celebrados o marginados: estos son factores que separan a las personas que pertenecen de aquellas que no.

Powell, director del Instituto Haas para una Sociedad Justa e Inclusiva, establece conexiones directas entre la desigualdad de oportunidades disponibles para las personas de color en Estados Unidos con los problemas de salud. No es solo mucho más probable que las personas de color vivan en barrios de alta pobreza que las personas blancas, sino también sufren el estrés diario de racismo que afecta su salud física. En comparación con la gente blanca en EE. UU., las personas afroamericanas tienen una esperanza de vida más baja y más probabilidades de fallecer a una edad más temprana a causa de enfermedades del corazón, diabetes, cáncer y homicidios, entre otras.

Powell propuso que no es suficiente reducir disparidades para alcanzar la equidad de salud en Estados Unidos. En cambio, urgió enfocarse en ayudar a todos para que gocen de una mejor salud en general. Este objetivo nos obliga a reconocer que las personas enfrentan obstáculos de diferentes escalas y magnitudes, por lo que se deben desarrollar soluciones diferentes para cada grupo. Estas soluciones específicas suelen venir de las propias comunidades.

Otra ponente, Doran Schrantz, dio sugerencias específicas sobre cómo lograr estos objetivos a través de la organización comunitaria. Schrantz, directora ejecutiva de ISAIAH, una organización religiosa que promueve la igualdad racial y económica en Minnesota, describió una campaña de dos años para que la oficina del gobernador prestara atención a las disparidades de salud que afectan a los niños de color. La organización desarrolló programas de liderazgo, escribió tarjetas postales, organizó demostraciones y narraciones públicas; así, obtuvieron una audiencia con el nuevo gobernador electo y una invitación para ayudar a formar su gabinete.

“Es un ejemplo impactante de lo que puede suceder cuando obtienes suficiente poder”, Schrantz dijo.

Incluso en comunidades pequeñas se pueden implementar estrategias para aumentar el poder de los grupos más marginados. Susan Wilger, directora del Centro Nacional para las Comunidades Fronterizas (National Center for Frontier Communities), describió cómo cuatro condados rurales empobrecidos en Nuevo México trabajaron juntos para abordar la inseguridad alimentaria.

“Lo que podíamos hacer a nivel condado era limitado. Nuestra voz era demasiado débil”, dijo. “Entonces nos preguntamos: ¿qué tal si colaboramos con toda la región?”

Establecer una colaboración les permitió combinar fuentes de financiamiento, aumentar el número de integrantes y aumentar el apoyo local. Trabajando directamente con los coordinadores de la despensa de alimentos, los funcionarios electos y los defensores de la salud pública, mejoraron con éxito los estándares nutricionales de las donaciones de alimentos y aumentaron la frecuencia de su distribución.

“El sentido de pertenencia es el regalo más grande que la sociedad nos puede dar”, Powell señaló. La tarea de The Trust es asegurar que todos en Colorado reciban este regalo.

Ve videos de las presentaciones de la Serie de aprendizaje sobre la equidad en salud.

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